Tipos de malla para invernaderos



• Malla Luz (Sombra): Controla la cantidad de luz, disminuye la velocidad del viento, protege del granizo, pájaros y radiación solar.

• Malla para Control de Insectos: Evita la entrada de los insectos al interior del Invernadero.

• Malla Suelo ó Ground Cover: Evita el crecimiento de maleza, ahorra uso de herbicidas, permite el paso de agua, así como la alineación de árboles, arbustos y plantas. Permite caminar sobre ella.

• Malla Tutora: Utilizada para la separación y apoyo en la producción de flores y hortalizas. Permite el crecimiento uniforme y recto del tallo, así como el soporte del fruto.

• Malla Antiáfidos: Evita el ingreso de trips y mosca blanca al interior del Invernadero. Utilizado como cubierta ó protección de ventilas.

Lechuga hidroponica: cultivo de lechugas en Trujillo - La Libertad - Perú

Un Video muy interesante, que muestra como se puede promover el desarrollo sustentable con proyectos que fomentan la generacion de alimentos vegetales saludables sin contaminantes.

Nuevo método: Plantas más resistentes a los virus



Un equipo de investigadores del Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas  (IBMCP) –centro mixto de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y el CSIC– ha hallado un nuevo método para aumentar la resistencia de las plantas frente a la acción de determinados virus, en concreto, los potyvirus, responsables de grandes pérdidas en cultivos ornamentales, agrícolas y hortofrutícolas, como patata, pimiento y tomate, informaron fuentes de la institución académica en un comunicado.

Potyvirus

Para lograr esa mayor resistencia de la planta, los investigadores valencianos han logrado inhibir la expresión de un gen cuya presencia favorece la reproducción del virus y, por tanto, la infección de la planta. Se trata en concreto del gen AtDBP1, detallaron las mismas fuentes.

“Este hallazgo adquiere una gran relevancia en el ámbito de la agricultura, ya que ayuda a prevenir infecciones en las plantas, proteger los cultivos y, fundamentalmente, a minimizar así las pérdidas agrarias derivadas de la incidencia de los virus”, apunta Pablo Vera, investigador del IBMCP.

Y es que los potyvirus suponen una de las mayores amenazas para este sector, ya que provocan una notable reducción tanto en la calidad de los cultivos, como en su productividad, son causa de necrosis en hojas y raíces, provocan que el fruto no se desarrolle correctamente e incluso pueden acabar con la planta.

“Al inhibir este gen, que favorece que el virus se replique, conseguimos aumentar su resistencia y, por tanto, evitar todos estos problemas”, destaca Pablo Vera.

La novedad de la invención radica en que hasta ahora nadie había establecido que la inhibición del gen o la pérdida de su funcionalidad diera lugar a plantas más resistentes a potyvirus.

Los investigadores del IBMCP realizaron su estudio a nivel de laboratorio sobre Arabidopsis thaliana y, según apuntan José Luis Carrasco y Mª José Castelló, miembros del equipo de trabajo del IBMCP (UPV-CSIC), queda pendiente realizar una investigación en plantas de interés agronómico.

“El tiempo necesario hasta la introducción de la invención en el mercado oscila entre los tres o cuatro años para conseguir la planta deseada y de ocho a diez años para cumplir los requisitos legales”, apunta Pablo Vera.

La invención es aplicable sobre todo a variedades vegetales y, en particular, es especialmente interesante en el mercado de la bioenergía.

Control de plagas y enfermedades en los cultivos



Las grandes pérdidas producidas en la agricultura por plagas y enfermedades, así como los cuantiosos gastos de los tratamientos para intentar aminorar estos daños, pueden ser reducidos notablemente.

Para conseguirlo es preciso racionalizar, y sobre todo modernizar, las técnicas de prevención, integrando en la protección de los cultivos todos aquellos factores que inciden en el desarrollo de las epidemias.
Los fundamentos de la integración se pueden resumir en los siguientes puntos:

Aprovechar al máximo el gran desarrollo conseguido por la meteorología agrícola y la informática. Gracias a ello es posible construir para una zona micro climática determinada, modelos de evolución de las diferentes epidemias.

Gracias al estudio de las relaciones existentes entre la climatología y la evolución de los parásitos, es posible fijar con una cierta precisión el desarrollo epidemiológico en cada zona. Esto requiere, también, un moderno material informático.

Si a todo esto se le añade la práctica de tratamientos racionales en función de la población de parásitos o de la intensidad de la enfermedad, interviniendo a tiempo con productos y maquinaria adecuados, el costo se reducirá y la efectividad aumentará.

La eficiencia de un tratamiento para plagas será mayor cuanto más pronto se aplique, pero también será muy interesante evitar toda intervención inútil, fuente de gastos suplementarios.

En el laboratorio Calaf, por ejemplo, se desarrolló un equipo electrónico para la prevención del “moteado” de los perales y manzanos. Dado que el riesgo de contaminación por moteado y su posterior desarrollo guardan relación con el tiempo durante el cual están mojadas las hojas, así como con la temperatura ambiente existente durante el mismo, el equipo controla estos factores y pone en evidencia los diferentes grados de peligrosidad antes y después de la contaminación, indicando, en caso de producirse ésta, el tiempo disponible para su tratamiento efectivo.
Control de plagas

Tratamientos como las feromonas aplicadas en programas de lucha integrada, representan una herramienta válida a disposición de los técnicos y agricultores para la defensa de los cultivos de frutales, también los atrayentes, trampas y el control biológico.
Plantas más resistentes a los virus

Investigadores del Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas, ha hallado un nuevo método para aumentar la resistencia de las plantas frente a la acción de determinados virus, en concreto, los potyvirus, responsables de grandes pérdidas en cultivos agrícolas y hortofrutícolas, como patata, pimiento y tomate.

Los investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia, han logrado inhibir la expresión de un gen cuya presencia favorece la reproducción del virus y, por tanto, la infección en la planta. Este hallazgo adquiere una gran relevancia en el ámbito de la agricultura, ya que ayuda a prevenir infecciones en las plantas, proteger los cultivos y, fundamentalmente, a minimizar así las pérdidas agrarias derivadas de la incidencia de los virus.

Plantines de tabaco en hidroponia

Para los pequeños productores, constituye un problema la disponibilidad de agua para regar los almácigos con regadera o cisterna. La tecnología aquí propuesta soluciona el problema de la disponibilidad de agua y proporciona una serie de beneficios adicionales ya que permite ahorrar tiempo, evita la rotura de las raíces de las plántulas y no requiere el uso de bromuro de metilo para desinfectar el suelo.

La técnica consiste en la construcción de una pileta, para lo cual previamente se nivela el suelo y se arma un marco de alambre, ladrillo o bloques superpuestos, al que se forra con plástico y se llena con agua. Sobre el agua se colocan bandejas de telgopor con sustrato y en cada celda se siembra una semilla. Para realizar el trasplante se llevan las bandejas al campo. La notable uniformidad del tamaño de las plantas y su sistema radicular hace innecesaria la selección de plantines. Las plantas obtenidas por este método se pueden plantar en forma manual o mecánica.
Contexto de uso

Debido a que se trata de una tecnología de reciente difusión, en la actualidad son pocos los pequeños productores que están produciendo plantines de tabaco hidropónicos. En la localidad de Marapa el Grupo La Colorada empleó la tecnología en el año 1998. La misma técnica tuvo mayor difusión entre los grandes productores, quienes implantaron almácigos hidropónicos para plantar 100 ha de tabaco en la zona tabacalera de Tucumán.

Las explotaciones dominantes del sector son pequeñas (no superan las 3 ha). La tenencia de la tierra varía en cada caso, existiendo propietarios, arrendatarios, y tenentes precarios. En estos sistemas productivos, el rubro principal es el tabaco y la mano de obra es familiar, ya que resulta difícil conseguir obreros experimentados que quieran trabajar en las pequeñas explotaciones. Los sistemas productivos se encuentran ubicados en el Sur de la provincia de Tucumán, en las zonas fitogeograficas del Pedemonte y la Llanura Chaco Pampeana. Las precipitaciones no superan los 700 mm anuales en régimen monzónico. Existen problemas de erosión por mal manejo del agua de riego y canales de desagüe.
Desempeño

Se destaca la mayor eficiencia de la mano de obra ya que no es necesario realizar riegos todos los días. Se logra además, un excelente sistema radicular en los plantines y se elimina el uso de bromuro de metilo.

La producción de plantines en hidroponía coexiste con la producción de plantines en almácigos convencionales, con el uso de agrotextiles, plástico perforado y riego por goteo. Además de las ventajas arriba mencionadas, el uso de esta tecnología brinda una mayor seguridad debido a la menor manipulación de productos químicos (los productos se aplican en el agua de la pileta).
Costo

Para incorporar la tecnología descripta se deben comprar bloques, ladrillos o alambre, plástico negro de 200 micrones, bandejas de telgopor, sustrato para el llenado de bandejas, semilla peleteada y plástico transparente para cobertura móvil de 70 micrones. La mayor parte de los insumos que demanda esta tecnología proviene del mercado. El valor de estos materiales es de aproximadamente 400 $/ha. El sustrato y la semilla se deben comprar anualmente y su precio es de 130 $/ha. Los plásticos de la pileta y la cobertura se deben cambiar cada 3 años, mientras que las bandejas pueden durar hasta 6 años (depende del cuidado en la manipulación). La construcción de las instalaciones para el cultivo hidropónico requiere 5 jornales/año. Una vez que los plantines han nacido, se necesita aproximadamente 1 jornal/semana para tapar y destapar los almácigos.
Resultados esperados

Los principales resultados productivos que se esperan lograr a partir de su uso son: el ahorro de jornales por eliminación de riegos diarios; un mejor uso de la superficie disponible, ya que se necesita menor extensión de almácigos por hectárea de cultivo a plantar; la calidad de los platines es mucho mayor; no se observan roturas radiculares tan comunes en los almácigos tradicionales; y se evita el uso del bromuro de metilo.

El tiempo que el productor emplea en el manejo de los almácigos tradicionales puede ser destinado a la realización de otras tareas que le pueden generar otros ingresos y/o un mayor bienestar. No obstante, no es fácil estimar esta mejora en términos cuantitativos. Resulta oportuno señalar que este sistema de producción puede servir para la producción de otro tipo de plantines. Esto permitiría realizar un mejor aprovechamiento del espacio disponible. Esta tecnología mejora la calidad de vida de la familia rural ya que disminuye el uso de energía en la producción de plantines y disminuye el riesgo al que se ven expuestos los productores debido a la forma en que se usan los productos químicos.

Esta tecnología no produce desechos indeseables ni contaminación. Al contrario, permite eliminar el uso de bromuro de metilo.
Adaptación

Es una tecnología sencilla de buena adaptación y adopción. Si bien la producción de plantines hidropónicos demanda una mayor inversión, ésta se compensa si se analizan los beneficios que proporciona.
Institución

Esta tecnología es ofrecida por la Estación Experimental Agroindustrial "Obispo Colombres".

La difusión se realiza a través de reuniones con productores, visitas prediales y cartillas especialmente elaboradas con Instituciones y Empresas como INTA, Representantes de Productores Tabacaleros, Massalin Particulares, Nobleza Piccardo y Secretaria de Agricultura y Ganadería de Tucumán. La capacitación en el manejo del almácigo es importante, ya que presenta particularidades que los distinguen de los almácigos tradicionales. En especial, en el uso de los agroquímicos preventivos que se incorporan en el agua.

Para mayor información sobre las características de esta tecnología contactar a la EEA "Obispo Colombres".


COSTOS Y RENTABILIDAD DE LA HUERTA HIDROPONICA POPULAR

Además de ser una actividad muy productiva, la Huerta
Hidropónica Popular (HHP) es
compatible con las tareas del hogar, el estudio y los oficios normales
de cada uno de los miembros de una familia. El sistema no exige
exclusividad, pero sí constancia y dedicación de una pequeña cantidad de
tiempo diario. Es una actividad complementaria, que puede ser
desempeñada en conjunto por todos los miembros de la familia

de acuerdo con el tiempo libre que cada uno esté
dispuesto a dedicar a la huerta. Los beneficios que se pueden derivar de
la Hidroponía Popular se pueden dividir en dos grupos: los de tipo
social y los de tipo económico, que se expresan como rentabilidad o
ingresos netos.




Beneficio Social


El beneficio social se obtiene como producto del cambio de las condiciones de
vida de las familias, considerando una mejor calidad de la alimentación, la
protección de la salud y la obtención de ingresos. Los nuevos ingresos
permitirían autofinanciar el funcionamiento y la expansión de la huerta, además
de cubrir pequeñas necesidades diarias que antes estaban insatisfechas.


El beneficio también se refleja en el cambio de actitud de
las familias y de las comunidades, que dejan de ser miembros pasivos para
convertirse en miembros activos en el proceso de su propio desarrollo. Es
importante resaltar cómo los niños asumen actitudes muy positivas a través de
estas actividades productivas, que aparte de permitirles cosechar productos
comestibles, les da la posibilidad de adquirir tempranamente conocimientos
prácticos que les hacen menos abstractas algunas áreas del saber, como sucede
con la química, la biología y otras.

Rentabilidad Económica

El beneficio económico o rentabilidad es la que se espera obtener mediante la
explotación continuada y sistemática de Huerta Hidropónica Popular (HHP) en superficies superiores a 30
metros cuadrados de cultivos, buscando obtener un rendimiento económico por los
gastos incurridos y el trabajo realizado. A modo de ejemplo:

Un adecuado manejo de las Huerta Hidropónica Popular (HHP) ha demostrado en distintas experiencias y ensayos
que el costo total de la producción por metro cuadrado se paga con la venta de
13 lechugas, estimándose además una pérdida de tres lechugas por metro cuadrado
y por cosecha. Es imprescindible para ello establecer una programación que
incluya todas las etapas por las que atraviesan los cultivos seleccionados como
más promisorios, considerando condiciones ambientales, posibilidades técnicas de
manejo y mercados disponibles para la venta. Lo importante es tener algún tipo
de producto disponible para la venta en todas las épocas del año.

Para determinar la rentabilidad económica es necesario definir los costos de
producción, el precio de venta y la diferencia entre éstos dos o la utilidad.
Los costos de producción son de dos tipos:

- costos de instalación de la huerta, y

- los costos necesarios para que funcione en cada período productivo.

Los costos de instalación incluyen el valor de los contenedores, los plásticos,
los sustratos, las mangueras, las herramientas y toda la inversión necesaria
para empezar. Esta será amortizada a lo largo de varias cosechas. También se
consideran aquí los equipos necesarios para la preparación, almacenamiento y
aplicación de los nutrientes y los insecticidas naturales, tales como bidones,
baldes, atomizadores y otros.

Los costos de funcionamiento comprenden el agua, los nutrientes, el aceite y los
productos para el control de las plagas cuando hay que comprarlos (ajos, ajíes),
un cuaderno para anotaciones técnicas y contables, y la mano de obra.

Para comprender mejor el tema de la rentabilidad presentaremos un ejemplo con
una de las especies más aceptadas, tanto por los cultivadores como por los
consumidores, como es el caso de la lechuga.


Determinaremos el costo de producción en el sistema de Raíz
Flotante que es el preferido por quienes tienen el propósito de establecerse
como empresa rentable, ya que la producción se logra en menos tiempo y con menor
esfuerzo físico, pero con mayor dedicación y constancia: Sabemos por las clases
anteriores que en el sistema flotante podemos obtener 31 lechugas adultas por
metro cuadrado, de tal forma que determinamos el costo de producción por metro
cuadrado de cultivo.

 


Cuadro 1. Costos fijos de instalación

























































Insumo imputable
  • Costo total/m2
  • US $


  • Amortización número de cosechas
  • US $

Valor por

m2

Contenedor de madera 4,70 20 0,23
Plástico negro 0,36 5 0,07
“Plumavit” 1,29 5 0,25
Herramientas 1,03 10 0,10
Equipo 1,51 10 0,15
Mano de obra 2,05 10 0,20
Sub total 1,00
Imprevistos 0,50
Total costos fijos m2 1,50

(Cambio aplicado: CH$ 385 por US$ 1.00, febrero 12 de 1993)

En algunos países deberá considerarse además el costo de las coberturas para
proteger los cultivos del exceso de sol, de las heladas o de las lluvias ácidas,
lo que aumenta el valor de los costos por metro cuadrado en aproximadamente US$
1,5 - 2,0


Cuadro 2. Costos variables de producción (para una cosecha)












































Insumo Costo total/m2 US$ Valor imputable  por

m2/cosecha US$

31 Plántulas de almácigo de 35 días 0,48 0,48
Solución nutritiva 0,63 0,63
Insecticidas naturales 0,05 0,05
Mano de obra 1,80 1,80
Sub total 2,96
Imprevistos 5%  0,15
Total costos variables  3,11
Costo Total (costos fijos más
costos variables)
4,61



Ingresos

Estimando pérdidas del 9 por ciento sobre 31 lechugas, obtenemos

28 unidades, cuyo precio de venta fue estimado en US$ 0,31. Lo anterior

nos permite un ingreso bruto de US$ 8,68/m2.

Utilidad = Ingreso Total - Costo Total

Utilidad = 8,68 - 4,61 = 4,07 US$ por m2/cosecha de

lechugas

Utilidad 4,07

I.R.= ------------------- x 100 = ----- x 100 = 88,28 %

Inversión Total 4,61

I.R. (Indice de Rentabilidad) = 88,28 %

 


Se debe enfatizar que dentro de los costos está considerado
el valor de la mano de obra aportada por la familia, con lo que se tiene el
doble beneficio del empleo más la rentabilidad del cultivo. Los costos fijos
calculados en el ejemplo podrían ser menores si se utilizaran maderas de segunda
mano o usadas. En muchos países es posible conseguir "palets" o tarimas para
estibar carga en los puertos marítimos o aéreos, que al desarmarlos dan tablas
de buena calidad y de dimensiones muy uniformes. El anterior ejemplo puede ser
considerado como una base para determinar la rentabilidad de otros cultivos, que
puede ser diferente dependiendo de las ventajas comparativas o de factores
adversos que existan para el cultivo y la comercialización de algunas especies.
Hay especies más convenientes en unos países que en otros pero, en general, en
la mayoría de ellas la rentabilidad económica es alta, especialmente en el
cultivo de la lechuga, que en todos los países ha demostrado ser el mejor
cultivo tanto del punto de vista técnico como económico. Como hemos visto en
este Curso Audiovisual (video y manual) las Huertas Hidropónicas Populares
permiten obtener beneficios sociales y económicos. Depende de la dedicación y
constancia el que estos beneficios se transformen en una realidad que ayudará a
mejorar la calidad de vida de las familias. Planifique su tiempo y empiece a
instalar una Huerta Hidropónica Popular (HHP) y si sigue con esmero las
recomendaciones ofrecidas antes de 90 días tendrá la primera cosecha de
distintas hortalizas, y plantas medicinales o aromáticas.


El Cultivo Hidropónico de la Lechuga



La lechuga (lactuca Sativa) es una planta que se cultiva generalmente para el uso de su hoja como vegetal. Se consume generalmente fresca, cómo complemento de otros alimentos, aunque en china se consume cocinada y la hoja es tan importante para ellos como el tallo de la planta. La variedad más popular en América es la Iceberg que crece de manera compacta (similar al repollo) y tiene una textura crocante.

La germinación de la lechuga

La lechuga puede ser germinada en espuma de poliuretano, al igual que el tomate y el pepino. Sin embargo, las semillas de lechuga tienen normalmente una viabilidad muy bajita por lo que es preciso hacer un ensayo de germinación con unas pocas semillas antes de intentar germinarlas en gran cantidad. Si se conservar las semillas en la nevera, pueden ser viables hasta por 6 meses.

Una recomendación para incrementar la germinación es colocar las semillas previamente por 2 horas en una solución nutritiva de conductividad eléctrica igual a 0.5 mS/cm2. Después de esto las semillas se colocan en agua a 40°F se espera su germinación. Una vez las semillas hayan germinado deben ser rápidamente colocadas a temperaturas entre los 60 y 65°F. Después de la germinación y hasta el transplante, se utiliza una solución de conductividad 1.5 mS/cm2.

Tiempo : 2 a 4 días
Medio : Espuma
Temperatura :40 a 50°F
Tiempo para transplante a medio : 14 - 21 días (una vez la planta haya desarrollada 2 o 3 hojas)

La Lechuga Hidropónica

La Lechuga funciona mejor en sistemas tipo NFT en tubos de PVC de 2 pulgadas de diámetro aunque claramente se utilizan sistemas comerciales de balsa con amplio éxito.

El pH ideal para el crecimiento de la lechuga está entre 5.5 y 6 y la conductividad eléctrica ideal de la solción nutritiva debe estar entre los 1 y 2.3 mS/cm2. En caso de que existan días con temperaturas por encima de los 80°F, la conductividad eléctrica debe bajarse a niveles próximos a 1 mS/cm2.

Cómo medio hidropónico para la lechuga, recomendaría un sistema que tenga gravilla como soporte y este constantemente lleno de solución nutritiva. Tanto sistemas NTF como sistemas ebb & flow pueden tener éxito con esta planta.

Las lechugas responden bien a la solución genérica explicada en esta página si esta se diluye con agua hasta alcanzar las conductividades explicadas anteriomente. En condiciones óptiamas debe utilizarse la solución para lechuga descrita en la sección de soluciones nutritivas de esta página web.

El Cultivo de la Lechuga

La lechuga prefiere los climas fríos, por encima de 0°C, pues la planta no es resistente a las heladas. También hay que tener en cuenta que la planta pasa rapidamente a su fase de floración por encima de los 80-85°F , lo cual hace la planta amarga al gusto y practicamente no apta para el consumo. El clima ideal para cultivo esá entre los 60 y 75°F. El tiempo que generalmente toma una cosecha está entre los 30 y 45 días, aunque claramente puede ser reducido hasta a 25 días si existen las condiciones de luz y nutrientes adecuadas.

En Japón, las lechugas crecen en el Subway


Debido a la escasez de espacio para cultivar, el concepto de “huerto urbano” es una verdadera utopía en el país nipón. Por eso han tenido que idear otra versión más adaptada a su natural querencia por los espacios pequeños y comprimidos: los huertos hidropónicos dentro de edificios. Y es que la última moda en Japón es contratar los derechos de uso de una de estas pequeñas huertas hidropónicas en pleno centro de la ciudad, como terapia anti estrés con sentimiento ecofriendly.

Un cultivo hidropónico no necesita terreno para realizarse, pues las raíces de las plantas reciben una solución nutritiva equilibrada disuelta en agua, con todos los elementos esenciales para su desarrollo en un medio inerte como la grava o la perlita. La luz se proporciona mediante lámparas.

Pero más allá del negocio de los huertos de alquiler, las empresas también se han lanzado a cultivar sus propias hortalizas…en las tiendas. Uno de los primeros es un pequeño local de la sandwichería Subway en el metro de Japón, en los bajos de el Edificio Marunouchi. Este Subway cuenta con una vitrificada “fábrica de hortalizas” en el centro de la tienda, que nutre de frescor las ensaladas de los ejecutivos.


Dentro de la vitrina, las plantas de lechuga viven en distintas etapas de desarrollo, cultivándose con hidroponia y sin la ayuda de productos agroquímicos. Cuando un cliente pide una ensalada, la asalariada del gorro abre la puerta, corta la lechuga fresquísima y se la pone (lavada, of course) en su ensalada de pollo o dentro del wrap a su elección.

También existen asientos dispuestos alrededor de la fábrica de hortalizas, donde los clientes pueden disfrutar de su comida mientras miran las lechugas crecer con brío, sin duda un buen entretenimiento para los 20 minutos que tienen para el almuerzo.

Sin embargo, no es todo verde lo que reluce. O para Subway sí: la “lechuga orgánica de tienda” tiene un suplemento (vamos, que cuesta el doble que la lechuga habitual) y sólo puede abastecer el 5% de los requerimientos de ensaladas del local.

Así que más que un “centro de crecimiento y recolección de lechugas ecológicas”, el expositor es un guiño de cara a la galería, para que el público pueda sentir que los vegetales que se come a mitad de precio son igual de orgánicos que los que lucen lustrosos detrás de un cristal y debajo de un foco.

Probabilidades que los Subways españoles lo importen: 0%, aquí nos sobra el terreno para hacer huertos; igual si pusieran una pecera para observar crecer el sushi podría funcionar…



Tecnología de producción: Equipamientos para invernaderos

La tecnología aplicada a los invernaderos ha sufrido un notable avance los últimos años, no obstante, resulta difícil describir el invernadero ideal desde el punto de vista de la rentabilidad, ya que si decidimos incorporar todos los medios a nuestro alcance puede  que la inversión no sea viable.

Con este artículo, no pretendemos dar una lección magistral de tecnología, nos conformamos con una breve explicación de los equipamientos de los invernaderos, su coste aproximado e invitar al lector a reflexionar sobre las mejoras rentables que puede realizar en su explotación.

Los equipamientos que se describen son para invernaderos de plantas hortícolas aunque muchos de ellos se pueden aplicar también a plantas ornamentales.
 
Entrando en materia, nuestra  primera recomendación es definir los parámetros básicos a la hora de construir un invernadero, como son tamaño, altura, orientación, tipo de cubierta, altura del emparrillado,  en general la definición del tipo de invernadero debe estar ligada al tipo de cultivo y ciclo que pretendemos desarrollar.

Ya hemos construido el invernadero y ahora toca equiparlo, a continuación definimos los equipamientos más comunes.
 

VENTILACIÓN.
La ventilación es un factor fundamental en cualquier invernadero, hay diferentes reglas sobre el tamaño óptimo de las ventanas, pero lo cierto es que cada invernadero se comporta de forma distinta siendo la naturaleza la que nos puede ayudar en ciertos casos y perjudicar en otros, pero como norma general, siempre es preferible colocar ventanas en exceso, si están cerradas no pasa nada, pero si en fechas concretas tenemos que ventilar y nos faltan ventanas, podemos tener problemas serios en el cultivo que pueden  ocasionar pérdidas importantes de  producción  y  calidad. En invernaderos de raspa y amagado modelo Almería, se suelen colocar ventanas tipo libro en casi todas las capillas, siendo lo normal unos 1200 ml de ventanas por Ha. Ultimamente se están motorizando lo que permite la automatización de su apertura. En este tipo de invernaderos al no ser completamente herméticos,  hay una cierta parte de ventilación que se realiza de forma natural aunque esté automatizada. En invernaderos tipo multitúnel o de cristal, al ser totalmente herméticos, se instalan ventanas en todos los arcos o capillas e incluso en los laterales cuando preveamos dificultades en la ventilación. En los invernaderos multicapilla y en los de cristal, la automatización del funcionamiento de las ventanas es imprescindible, de lo contrario nos podemos encontrar con sorpresas muy desagradables ya que es muy fácil provocar enfermedades por exceso de humedad y temperatura e incluso el caso contrario, ventilar en exceso puede bajar  la humedad relativa  perjudicando el cuaje de los frutos.

En el manejo de las ventanas,  tenemos que adiestrarnos  para sacarle el máximo rendimiento, siendo la forma de trabajar  distinta en función de los equipamientos del invernadero. Si disponemos de calefacción, pantalla térmica, Fog-System y fertilización carbónica, lo mejor es instalar  un buen software que interrelacione todos los parámetros, de este modo conseguiremos la máxima  eficiencia, por el contrario, si  lo que tenemos es un invernadero sin ningún elemento extra, recomendamos un controlador simple pero eficaz. No es extraño encontrar instalaciones muy simples que han puesto un programa muy complicado y al final esta desconectado por su complejidad de manejo, también existe el caso contrario, querer controlar a mano ventanas motorizadas.
 
Como hemos comentado anteriormente, nuestra recomendación  es tener una buena ventilación, aunque siendo las ventanas el mejor sistema, a veces es necesario  completar la ventilación  con extractores de gran caudal e incluso ventiladores homogeneizadores internos.
Los precios de las  ventanas suelen estar entre 12 y 18 €/m.lineal, en función de la longitud  y características.

CONTROLADORES AUTOMÁTICOS.-
El controlar mas básico sería el que en el interior del invernadero mide la humedad y temperatura, y en el exterior mide la velocidad del viento, dirección del viento y presencia de lluvia, siendo aconsejable medir también la humedad y temperatura exterior. Con estos datos, el controlador nos posiciona las ventanas para conseguir las consignas de temperatura y  humedad. Lo ideal seria que tuviese  periodos o franjas horarias siendo imprescindible distinguir el día de la noche. Por cada compartimento o invernadero, tenemos que medir la humedad y temperatura, a veces en invernaderos de superficie superior a 10.000 m2  o cuando el clima no es homogéneo por estar en pendiente, es aconsejable poner varias sondas y actuar por zonas aunque los sensores externos sean únicos.
Si existe la posibilidad de instalar un Ordenador, tenemos la ventaja de manejar el controlador de  forma más sencilla, a la vez que  va a registrar los datos climáticos para  poder analizarlos e ir cambiando parámetros.
A medida que coloquemos más equipamientos, el controlador tiene que tener mayor capacidad y el uso del ordenador pasa a ser imprescindible. En instalaciones con calefacción y aporte de CO2, recomendamos utilizar software expertos que se adelanten a las actuaciones y gestionen perfectamente la energía global que interviene en el invernadero.
La diversidad de equipos, hace que los precios sean distintos en función de las necesidades, un equipo básico para aun sólo invernadero puede costar 3.000 € y un equipo completo para invernaderos de alta tecnóloga  puede tener un coste superior a  60.000 €.

EXTRACTORES  DE GRAN CAUDAL.
Cuando por cualquier motivo, la ventilación es deficitaria, una buena alternativa es el uso de extractores de gran caudal colocados estratégicamente para paliar la falta de ventilación e incluso ser el único elemento que ventile.
Son ventiladores con unas dimensiones aproximadas de 1,4x1, 4 mts, la potencia nominal oscila entre 1 y 1,5 CV con un caudal de extracción entre 35.000 y 43.000 m3/h. La cantidad  a instalar va a depender de las renovaciones hora/aire que queramos conseguir, lo   normal es instalar  entre 10 y 20 unidades por ha, colocando la mitad a cada lado de del invernadero, en posición de aspiración, ya que también se pueden colocar insuflando aire, a veces, cuando el invernadero es mas ancho de 50 o 60 mts, es conveniente colocar los extractores en la cubierta, a lo largo del pasillo central. El funcionamiento de los extractores tiene que ser automático, respondiendo como mínimo a las consignas de temperatura y humedad.
Una instalación media de extractores de gran caudal puede costar entre  8.000 y 12.000 €./ha.

VENTILADORES HOMOGENEIZADORES INTERIORES.-
Con estos ventiladores convenientemente instalados, conseguimos una recirculación  interior de aire, que va a producir una buena homogeneización del clima, factor fundamental cuando trabajamos con calefacción, también se pueden colocar para apoyar sistemas de control de humedad e incluso para ayudar a los extractores de gran caudal, igualmente ayudan a la polinización y favorecen la absorción de CO2 por las plantas. Como es lógico, su funcionamiento tiene que ser automático eligiendo el controlador más adecuado para el uso que pretendamos darle.
Dependiendo del uso y las renovaciones/hora, el coste puede estar entre 7.500 y 12.000 €/Hectárea

APORTE DE HUMEDAD.-

Este apartado es muy importante y como siempre, teniendo un buen diagnóstico de las necesidades, podremos utilizar el sistema más adecuado, a continuación resumimos los sistemas más comunes:

Sistema de alta presión, comúnmente conocido como Fog-System, funciona a una presión de 60 kg/cm2 o superior., aporta gotas de agua pequeñas del orden de 1 a 10 micras. Este  sistema regula perfectamente la humedad sin mojar las plantas, siendo capaz de bajar  la temperatura  del orden de 5 a 8 ºC en función de la humedad exterior y de la radiación existente. Este sistema es caro de instalar y  caro de mantener por la facilidad de obstrucción de las boquillas, podemos decir que sólo es adecuado con agua de lluvia o la procedente de osmosis.

 Sistema de baja presión, trabaja a unos 5 Kg/cm2 de presión,  su coste es muy inferior a los otros sistemas, genera gotas de agua entre 50 y 100 micras El objetivo de estos sistemas es mantener la humedad por encima del umbral mínimo, nos estamos refiriendo en torno al 50% de humedad relativa. Hay que tener mucho cuidado para que no mojen en exceso, aunque  situando bien las boquillas, podemos conseguir que solo moje la superficie de calle que hay entre dos filas de plantas, aquí también es importante un buen programador que gestione adecuadamente los pulsos, pausas y horarios.

Sistema  agua-aire, como dice su nombre  consiste  básicamente  en utilizar  boquillas que mezclan el agua con aire, consiguiendo gotas muy pequeñas, con este sistema podemos  regular el tamaño de la gota ajustando  las presiones del agua y el aire, podemos decir que hacemos el tamaño de gota de agua a la carta. Su precio es alto,  pero aporta numerosas ventajas, que hace  que el sistema a nuestro juicio sea rentable, no se obstruyen las boquillas, no moja y sobre todo y lo más interesante es que la instalación esta preparada para realizar tratamientos fitosanitarios de forma totalmente automática. En realidad este sistema esta especialmente concebido para la sulfatación automática denominada hidrosulfatación, aunque también se puede utilizar para nebulizar  Recomendamos que la gestión de todo el proceso la lleve un programador específico que sea capaz de realizar las tres funciones, nebulizar/sulfatar y limpieza de boquillas.
Los precios para un sistema alta presión pueden ser  entre 25.000 y 35.000 €/ ha,  para baja presión los precios pueden oscilar entre 12.000 y 15.000 €/ ha, para el sistema agua-aire  el  coste aproximado puede estar entre  22.000 y 26.000 €/ha.

CALEFACCIÓN.-
La tecnología esta muy avanzada en el control del clima del invernadero, básicamente hay dos sistemas de trasmitir la energía calorífica, por convección a través del aire o por radiación a través de tuberías calentadas por agua.
Como combustibles tenemos propano, gas natural, gasóleo, fuel, biomasa e incluso aguas termales. Cada combustible y sistema de calefacción tiene sus ventajas e inconvenientes siendo imprescindible el asesoramiento por expertos ya que es una inversión costosa y una factura anual de  combustible muy importante.
Aquí nos podemos encontrar desde los generadores de aire caliente utilizados fundamentalmente como preventivos de heladas o para uso esporádico, hasta los sistemas pesados utilizados fundamentalmente en los países fríos que son auténticas fábricas de cogeneración eléctrica aprovechando los subproductos agua caliente y CO2 para controlar el clima de los invernaderos normalmente de cristal. En países como Francia, Inglaterra y algunos más, es frecuente encontrar invernaderos cerca de centrales térmicas para aprovechar el agua caliente e incluso CO2 que se produce en la generación eléctrica.
Los sistemas de aire son los más baratos con un coste entre 8.000 y 10.000 €/ha, los de agua caliente son los más caros sobre todo si se utilizan raíles como emisores de calor, su coste puede ser entre 80.000 y 100.000 €/ha.
SENSORES .-
Es una tecnología que se va abriendo camino lentamente, hemos querido mencionarla ya que pensamos que en el futuro va aportar a la agricultura en general y en particular a los invernaderos, los datos suficientes como para poder hacer que las plantas trabajen a máximo rendimiento.
Se suelen utilizar varios sensores a la vez, siendo los más comunes los que miden el diámetro del tallo, la circulación de savia, el tamaño del fruto y la temperatura de la hoja. El monitoreo con estos sensores permite conocer como evolucionan las plantas y nos ayuda a tomar decisiones. Con los datos obtenidos podemos actual en la fertirigación, ventilación, calefacción, aporte de CO2 y en general buscar el punto de máximo rendimiento.

Un equipo medio de monitoreo  puede costar sobre 10.000 €

FERTILIZACIÓN CARBÓNICA   CO2.
En el proceso de fotosíntesis, las plantas absorben   CO2  a través  de los estomas siendo la energía solar la que realiza el proceso energético. La concentración de CO2 en la atmósfera es de unas 350 ppm, en invernaderos con poca ventilación, esta cifra baja al absorberlo las plantas, no siendo extraño medir valores inferiores a las 200 ppm. Con valores bajos de CO2, la planta frenan su desarrollo perdiendo productividad, la forma más sencilla de disponer de valores adecuados  es con una buena ventilación. Si aumentamos la concentración de CO2, favorecemos  la fotosíntesis haciendo plantas más productivas, la concentración de CO2 puede aumentarse hasta las 1.000 ppm mediante distintos métodos. El CO2 puede proceder de la combustión del gas natural o propano, en los países nórdicos se utiliza el ciclo combinado de energía, quemando gas natural e incorporando el CO2 al invernadero mediante tuberías de plástico. La combustión es aprovechada para calentar agua y almacenarla en depósitos calirifugados, el agua caliente se  utiliza de noche para calentar el invernadero. En nuestro país, se suele utilizar CO2 puro almacenado en estado líquido, mediante un evaporador se pasa a gas y es introducido en el invernadero mediante tuberías similares a las utilizadas en el riego por goteo. Al abrir las ventanas se va a la atmósfera, por lo que en zonas calurosas es muy difícil enriquecer CO2  por encima de 450 ppm.
En el sistema de CO2 líquido, el depósito- evaporador lo suele colocar el distribuidor del gas, teniendo el agricultor que colocar el lector-regulador de CO2 y los emisores con un coste aproximado entre 7.000 y 9.000 €/ha.

FERTIRRIGACIÓN.-
Con la aparición del cultivo hidropónico, se fueron adquiriendo grandes conocimientos sobre las necesidades nutricionales de las plantas, poco a poco se fue comprobando  que las plantas necesitan conjuntamente el agua y los nutrientes, aplicación que es imprescindible en cultivo hidropónico y aconsejable para cultivo en suelo, al uso conjunto de agua y abono se le  denomina  fertirrigación. Como es lógico, la aplicación de agua- abono a las plantas se realiza mediante  riego localizado, disponiendo cada planta de un emisor cercano.
La fertirrigación va a proporcionar a las plantas las necesidades hídricas y nutricionales necesarias para obtener la máxima producción con la mejor calidad posible. Por tanto,  el  equipamiento de fertirrigación es fundamental en cualquier explotación agrícola, sobre todo, porque va a trabajar diariamente, proporcionando individualmente a cada planta su dosis de agua-abono,  para ello es necesario que la instalación este perfectamente calculada, que los materiales sean de buena calidad para no sufrir problemas inesperados y tener garantizado un  servicio de mantenimiento muy profesional especialmente en hidropónico, tengamos en cuenta, que en varias horas sin regar, las plantas pueden sufrir graves daños y en un día entero, se podría perder toda la cosecha. En resumen, para la fertirrigación, por seguridad, aconsejamos invertir en la máxima calidad  ya que esta parte de la explotación es la  de menor coste, se da la paradoja,  que  en algunos  cultivos,  las semillas  para una única plantación tienen un coste superior a toda la instalación de fetirrigación que se amortiza en 10 años o más.

Según que el cultivo se desarrolle,  en suelo,  sobre sustrato, e incluso agua, la tipología de la instalación va a cambiar aunque muchas partes son iguales independientemente del  sistema de riego que utilicemos.
.
Todos los sistemas tienen en común que reciben agua, la filtran adecuadamente, le incorporan los nutrientes en las proporciones adecuadas y la aportan a las plantas en función de las necesidades.
El agua tiene que llegar al cabezal libre de partículas, si es necesario aconsejamos colocar filtros de arena, y dependiendo del tamaño de la instalación, la limpieza será manual o automática, a la salida del colector de filtrado de arena hay que instalar filtros de malla, su principal función es evitar que la arena pase al cabezal en caso de avería de alguno de los filtros de arena. A la salida del cabezal de fertirrigación, se instalan  filtros de disco con un tamiz entre 120 a 150 mesh,  no aconsejamos colocar filtros de malla porque en caso de rotura de la tela filtrante,  dejarían  pasar la suciedad al sistema de riego provocando la  obstrucción de los emisores,  igualmente, los filtros de malla dejan pasar residuos cuando se colmatan, sin embargo, los filtros de disco, al tener ranuras de gran longitud imposibilitan el paso de suciedad  y en caso de que no se limpien, acaban por no dejar pasar agua por mucho que lo intentemos y tendremos que limpiarlos obligatoriamente. La limpieza se puede realizar automáticamente con los modelos que tienen un pistón en su interior que libera la presión de las anillas y permite que el agua a contracorriente los limpie, para la limpieza manual hay que aflojar las anillas y lavarlas, la limpieza a contracorriente aquí no es efectiva.
 
El proceso de fertirigación se completa con el aporte de los nutrientes, para ello utilizamos depósitos de capacidades entre 1.000 y 5.000 litros para contener la solución nutritiva concentrada o los abonos líquidos, normalmente se  utilizan cuatro depósitos para diferenciar las soluciones N,P,K y microelementos, también hay que utilizar un depósito cerrado entre 1.000 y 2.000 litros para contener ácido, normalmente nítrico para regular el Ph.

El objetivo de la fertirigación es que a las plantas les lleguen una solución nutritiva equilibrada,  para ello comenzamos por analizar el agua limpia y añadirle los abonos que falten en las proporciones adecuadas para obtener el objetivo  nutricional prefijado.

Igualmente, en el proceso de fertirigación  se regula el  Ph. del agua de riego, siendo aconsejable un valor de salida en torno a 6, ya que un   medio liquido  ácido  favorece   la absorción de nutrientes por las plantas.

La forma más adecuada de dosificar el abono es marcar una consigna de Conductividad de riego y añadir en continuo la cantidad de solución de los depósitos necesaria para conseguir esta consigna, por tanto los abonos los medimos de forma  indirecta aunque el método es muy práctico y exacto. Conviene recordar que los abonos son sales, al disolverlos en el agua van aumentado el valor de la conductividad siendo esta  característica la que aprovechamos para dosificarlos.

La electrónica es hoy un elemento muy familiar que lo tenemos en todo el ámbito de nuestra vida, por ello, nos parece que sería casi obligatorio instalar un controlador electrónico en todos los cabezales de fertirrigación. Es el elemento encargado de iniciar y parar los riegos en función de sensores  de demanda para cultivo  hidropónico y por horario  en cultivos de suelo, también regula la Conductividad y el PH del agua de riego, dan alarmas etc. Las posibilidades de estos controladores, nos permiten controlarlos a distancia con sistemas GSM e incluso enviar SMS al teléfono móvil en caso de  alarmas, pudiendo informar también de los  riegos dados.

En cultivo hidropónico,  se utilizan goteros autocompensantes de 3 l/h  con dispositivo antidrenante para evitar las descargas de las tuberías al finalizar los riegos, se colocan, a un marco de 2x0,5 mts pudiendo también ser 1,66x0,4 mts.  La frecuencia de riego la marca la bandeja de demanda que dispone de unas varillas que dan orden de riego cuando falta el agua, también hay dispositivos que miden directamente el drenaje en campo e incluso el valor de la conductividad y el PH del drenaje. Al día nos podemos encontrar desde los 3 riegos diarios de 5 minutos en invierno hasta los 18 riegos diarios de 5 minutos al final de primavera, de ahí la importancia de disponer de una muy buena instalación.

Para el  cultivo en suelo, hay más variedad de emisores, desde los clásicos y antiguos goteros interlínea que con  emisores  entre 2 y 3 litros/hora cada 40 o 50 cms de tubería, hasta los sistemas de goteros integrados que permiten mayores distancias de riego y distintas variedades de caudales. En suelo se suele regar por horario cambiando el tiempo y frecuencia de riego según evolucione la planta. Los tensiómetros con contacto eléctrico nos pueden fijar automáticamente la frecuencia de riego.

Cultivo en agua, técnicamente denominado NFT, solo lo enumeramos para conocimiento general, pero pensamos que no es un sistema de ámbito global, más bien tiene carácter de investigación y en horticultura está reservado a muy pocos usuarios.
Se trata de recircular solución nutritiva por unos canales donde se colocan las raíces de las plantas sin necesidad de sustrato. La perfección y coste de la instalación unido a la tensión que provoca en el productor su explotación, son sus principales inconvenientes, como ventajas tenemos el control directo de la nutrición, ausencia de sustrato y utilización casi total del agua y nutrientes, necesitan drenar muy poco en función de la calidad del agua y del tipo de cultivo.

 Para un sistema hidropónico completo el coste de la instalación puede estar entre 18.000 y 22.000 €/ ha, para cultivo en suelo puede ser entre  13.000 y 15.000 €/ha

SULFATACIÓN.-
El equipo de sulfatación, es otro elemento imprescindible en el equipamiento de un invernadero. Tradicionalmente se ha utilizado la pulverización con bombas de alta presión y una aplicación  manual.
A lo largo del tiempo, el agricultor ha intentado adoptar sistemas de sulfatación en los que las personas no tengan contacto con los productos fitosanitarios, aunque tenemos que decir que dichos productos han evolucionado los últimos años siendo cada vez menos perniciosos para la salud. En la busca de estos sistemas, nos encontramos últimamente con  la hidrosulfatación o sistema agua/aire, que hemos descrito en el apartado de humedad. Este sistema sulfata por las noches de una forma totalmente automática y  en función del cultivo, se pueden sustituir casi todos los tratamientos manuales. Los sistemas de ultra bajo-volumen apoyados con ventiladores recirculadores, son también validos, aunque necesitan invernaderos con bastante cámara de aire libre y plantas que no sean de gran porte.

El precio de un sistema clásico de grupo presión centralizado y tomas en el invernadero, tiene un coste bajo en torno a los 1.500 €/Hectárea,  el precio del sistema hidrosulfatación lo hemos mencionado en el apartado aporte de humedad con un coste entre 22.000 y 26.000 €/ha, el ultra-bajo volumen incluido los ventiladores recirculadores puede costar entre 15.000 y 20.000 €/ha.

PANTALLAS TÉRMICAS.-.

Este equipamiento lo podemos situar entre los pasivos, su función es sobre todo el aislar el invernadero del frío en invierno y sombrear para evitar exceso de radiación en verano.  Su funcionamiento tiene que ser automático para conseguir el máximo rendimiento. Existen diferentes tipos de mallas siendo lo más complicado elegir un tipo que pueda servir para ambas funciones.

GESTIÓN MANO DE OBRA EN INVERANDEROS.-

Para finalizar este artículo, queremos hacer una reflexión sobre los invernaderos, es cierto que no atraviesan el mejor momento de rentabilidad, pero opinamos que en muchas explotaciones agrícolas, falta gestión empresarial y que bien llevadas, pueden ser igual de rentables que la mayoría de los sectores empresariales con sus ventajas e inconvenientes. El talón de Aquiles en los invernaderos es la mano de obra, escasa, poco profesionalizada y peor aún, mal gestionada por el empresario. Un buen control de personal en un invernadero, puede hacer que la explotación agrícola pase de deficitaria a rentable.

 Los sistemas de presencia y control de mano de obra son elementos de gran ayuda en la gestión de la rentabilidad de los invernaderos, están formados por una red de terminales con teclado, separados normalmente entre 30 o 40 mts, donde el trabajador introduce su código de trabajo, tarea que va a realizar y calle donde va a trabajar, con estos datos el programa  calcula el rendimiento de cada trabajador, el coste para cada tarea, el coste total, la previsión de personal, el ritmo de las tareas y en general cualquier informe que previamente hayamos generado, igualmente puede proporcionar  datos  estadísticos de gran  de utilidad,  recomendamos una reflexión sobre el tema.

Los precios son muy distintos en función de la superficie y los terminales a instalar, para una extensión media de 2 Ha un equipo básico puede costar  6.000  y 10.000 €.

Productos para Hidroponia: Nutrientes, Implementos e Instrumental

¿ Deseas productos para Hidroponia?
Visita la pagina http://www.hidroponia.gcaconsultora.com.ar/product_hidrop.html. Alli encontraras información util en relación al tema.
  Aqui un vistazo de dicha pagina:










NUTRIENTES COMPLETOS 


(Fórmulas
Multipropósito para uso directo


y preparados especiales)



  • POTE x
    500 g.  de Nutrientes Completos con Manual Básico
    FIL (rinde 250 litros)



  • POTE x 1
    kg. de Nutrientes Completos con Manual Básico FIL (rinde 500
    litros)



  • BOLSA
    Repuesto x 250 g. (rinde 125 litros)



  • BOLSA
    Repuesto x 1 kg. (rinde 500 litros)



  • BOLSA
    Repuesto x 5 kg. (rinde 2.500 litros)



  • POTE
    de Compuesto de Micronutrientes
    (contiene hierro, cobre,
    manganeso, Zinc, Boro, Molibdeno y Cobalto)


  • COMPUESTO de
    MICRONUTRIENTES



  • FORMULAS
    ESPECIALES
      a solicitud del cliente




Todos
los Productos completos contienen Macro y Micronutrientes y se
comercializan además en mayores volúmenes y en
componentes "A" y "B"




SALES
PURAS para
FORMULACIÓN


(Macro
y Micronutrientes)


  •  SULFATO DE
    MAGNESIO (Alemania/China)      
  •  SULFATO DE CALCIO 
  •  SULFATO DE AMONIO 
    (Bélgica/Alemania)
  •  SULFATO DE POTASIO 
    (Israel/Chile)
  •  SULFATO DE HIERRO Heptah. 
    (Brasil)
  •  SULFATO DE COBRE 
  •  SULFATO DE ZINC Monohidratado
  •  SULFATO DE MANGANESO (China)
  •  MOLIBDATO DE AMONIO
  •  SULFATO DE COBALTO

  •  NITRATO DE
    CALCIO  (Noruega/Sudáfrica)



  •  NITRATO DE SODIO
    (Chile)



  •  NITRATO DE
    POTASIO cristal (Israel/Chile)



  •  NITRATO DE AMONIO



  •  NITRATO DE
    MAGNESIO  (Israel)



  •  FOSFATO
    MONOCÁLCICO puro  (Israel)



  •  FOSFATO
    MONOPOTÁSICO puro (Israel)



  •  FOSFATO
    MONOAMÓNICO puro  (Israel)



  •  FOSFATO
    DIAMÓNICO
    puro                      



  •  ACIDO
    FOSFÓRICO 85% (Bélgica/Brasil)



  •  ACIDO
    NÍTRICO



  •  CARBONATO DE SODIO
    (España)



  •  ÁCIDO
    BÓRICO
     



  •  QUELATOS EN
    POLVO y LIQUIDO
                               
      




* Estas sales se comercializan en envases mínimos
de 50g los Micronutrientes y 250g


los Macronutrientes.


 


* Las procedencias no indicadas son en 


su mayoría de industria argentina.
En  los productos, hay frecuentes variaciones de
orígen.




 




 











MÓDULOS
FIL para CULTIVOS HIDROPÓNICOS 





 


Equipos
completos para cultivos hidropónicos adaptables a las
distintas funciones y capacidades. Incluyen básicamente:
Torre y mesada de sosten construídas en tubos de PVC blanco,
bidón dosificador y bidón colector, bandejas o
canaletas plásticas, sistema de mangueras y goteros, sistema
colector de líquidos excedentes, cobertura, pulverizador,
bandeja para semillero, nutrientes hidropónicos, y otros
elementos.


Con
la posibilidad de incorporarles sistemas opcionales
:
riego
automático o semi-automático,
iluminación, media sombra y ampliación de
capacidad de cultivo. Módulos personalizados.
Diseños especiales.


******



  • Mini-Módulo Base para
    cultivos hidropónicos en balcones, ambientes interiores y
    espacios reducidos. Ideal para la huerta familiar o
    didáctica. Pueden incorporarse hasta 6 bandejas.
















  • Módulos
    para hobbystas, huertas familiares o experimental previa a la etapa
    comercial o empleo didáctico en Colegios. Ideal para
    cultivos hidropónicos en ambientes interiores y espacios
    reducidos. Pueden incorporarse hasta 20 bandejas o canaletas y
    emplearse para
    diferentes sistemas hidropónicos. Los diseños se
    adaptan de acuerdo a los objetivos o espacio disponible.




Módulo Básico Automático, para
cultivos hidropónicos en caños rectangulares, sistema NFT





Módulo
Hidropónico FIL, experimental con Lechuga. En batea con sistema
floating (fondo), en canaleta (centro) y en tubos rectangulares con
sistema NFT.
Adelante, el semillero. Establecimiento situado en la Provincia de La Pampa.  




Módulo Básico Manual para
cultivo hidropónico en bandejas





Módulo Básico
Automático para cultivos hidropónicos en canaletas





Torre de sostén del bidón de
riego del modelo automático e instrumental de control




Bomba
elevadora y bidón colector con flotante eléctrico
 




 











IMPLEMENTOS 
e INSTRUMENTAL para HIDROPONIA







 












  • Bandejas plásticas
    para cultivos de 60x40x20cm.


  • Caños rectangulares y redondos
    con orificios  y Canaletas de PVC

  • Bandejas para semilleros de 50x30x15 cm.
     


  • Tubos plásticos para
    cultivos colgantes



  • Bidones plásticos reforzados de 10, 20 y
    30 litros con adaptador y canilla de 1/2"



  • Caño plástico negro de 1/2"
    para insertar goteros



  • Microtubo negro para sistema de riego por goteo



  • Goteros plásticos
    limpiables de 2 y 4 litros/hora



  • Nebulizadores Microjet (Italia) de 20 litros/hora,
    presión 1,5 a 2 Kg., radio de riego hasta 2,40 m2
    a 180° o 360°



  • Conectores para drenaje de bandejas



  • Codos, cuplas,
    reducciones, etc.para caño plástico de
    1/2" y microtubo



  • Bombas oxigenadoras de la solución
    nutritiva



  • Instrumental para Hidroponia:

    *Termómetros digitales
    y mercuriales para líquidos

    *pH-metros digitales, 

    *Higrómetro y Termómetro, 

    *Conductímetros
    Digitales,  *Temporizadores horarios, 


    *Sensores 



  • Ciclador Horario Digital FIL para
    automatización de riego. (ver imagen adelante)



  • Válvulas a solenoide.



  • CIP-FIL - Controlador inteligente Programable FIL.

    Diseño y venta de Sistemas Especiales de
    Ciclos de Riego, semi-automatización y
    automatización completa de procesos de producción
    hidropónica. 



Instrumental
para
automatización de ciclos de riego
 




CIP-FIL - Controlador
Inteligente Programable FIL, para cultivos hidropónicos




CHD-FIL
- Ciclador Horario Digital FIL




Válvula
a Solenoide 










 





 











 


INGENIERIA
HIDROPÓNICA


Proyectos
- Diseños - Planificación


Asesoramiento 


 





 


 


 


GCA
S.A.

dispone
de una amplia
experiencia en el campo de la Ingeniería
Hidropónica, acumulada durante muchos
años de actividad tanto en la Argentina como en el exterior.
Ha participado, y
lo sigue haciendo, en numerosos proyectos hidropónicos de
importancia. Cuenta además, con un equipo de
profesionales en distintas disciplinas, que le permite prestar un
servicio
integral y eficiente.



Solicite
Información:
 
hidroponia@gcaconsultora.com.ar


(Mail
para emergencias por incomunicación: gcaconsultora@gmail.com)

Como hacer jardines hidroponicos en casa


Muchos jardineros están volviéndose hacia los jardines hidropónicos por distintas razones. Este tipo de jardines  se caracterizan por ser pequeño y de fácil crecimiento en interior, además son perfectos para hacer crecer vegetales, en especial tomates rojos. Por si esto fuera poco, el equipo requerido para mantener un jardín de este estilo no es costoso y es relativamente fácil de manejar.

Los jardines hidropónicos son aquellos que hacen crecer plantas sin un suelo, en otras palabras son “jardines sin tierra”. Hay muchos métodos para realizar un jardín hidropónico, la mayoría funciona mejor que lo jardines tradicionales, porque es más fácil darle a la planta exactamente lo que necesita cuando lo necesita. En éstos jardines, las plantas sólo reciben aquello que uno le da, por eso usted será capaz de regular el pH, los nutrientes, la fuerza de los nutrientes, la cantidad de agua y la cantidad de luz que reciba (y no tendrá que preocuparse por el frío del invierno). Todo esto hace necesario que usted realice una investigación acerca de la planta que está intentando hacer crecer, para que sepa lo que le tiene que dar para que crezca.



La jardinería hidropónica es tan difícil como uno la haga. Puede ser complicado si usa sensores computarizados para controlar el fluido del agua, los nutrientes y la luz de las plantas. Sin embargo, puede resultar una tarea muy simple si tiene una sola planta. El sistema normal hidropónico generalmente consta de ciertas cosas: una bandeja de germinación, luz (natural o artificial), un tanque de agua, una bomba de agua controlada para el regado (o algún tipo de sistema de regado), y alguna especie de bomba de aire para darle oxígeno a los nutrientes.

El medio en donde las plantas crecen usado en los jardines hidropónicos puede ser de lana de roca, de fibra de coco, de grava, de arena o hasta de aire. Puede obtener las instrucciones en un negocio de jardinería o de una tienda virtual, o puede comprarlas por separado y fabricar su propio hábitat. También hay distintos equipos ya ensamblados para la venta, en las tiendas de jardinería.

Hay ciertos micro-nutrientes que son necesarios para hacer crecer una planta saludable, como el magnesio, el sulfuro, el calcio, el cobalto, el boro, el hierro, el manganeso y el zinc. Estos nutrientes son absolutamente esenciales para las plantas y su ausencia puede causar que las comidas no sean tan sanas y, en algunos casos, que cause problemas de salud a quienes las comen. También es muy importante que utilice un fertilizante de buena calidad para los jardines hidropónicos.

Otro aspecto muy importante de este tipo de jardines que debe ser regulado, es el balance del pH. Cuando el balance del pH varía, la planta pierde la habilidad de absorber los nutrientes que necesita. La ventaja que poseen los jardines hidropónicos por encima de los comunes es que el pH puede ser testeado y controlado con más facilidad. Aunque hay cientos de variaciones, entre ellas, la Paja; la Cultura Acuática; la Menguante y Flujo; la Goteadora; la N.F.T. y la Aereopónica, son las seis especies básicas de jardinería hidropónica. La jardinería hidropónica es fácil, barata y le permitirá tener productos frescos, flores, hierbas, vegetales y especias en todo el año.

Videos sobre Bolsas de Siembra Fibralur para Cultivos Hidroponicos


Videos tu.tv

ESPECIES QUE SE SIEMBRAN POR EL SISTEMA DE TRASPLANTE EN HHP: PERIODOS DE TIEMPO TRANSCURRIDOS ENTRE FASES

 

ESPECIE                                        PERIODO TRANSCURRIDO DESDE

Siembra a                   Germinación a                                                Trasplante

germinación                trasplante                                                       a cosecha

(días)                                         (días)                                                          (días)

Acelga

 

12

 

18-25

 

70 c.p.

Apio

 

20

 

30-35

 

95

Berenjena

 

10

 

20-25

 

75

Betarraga o
remolacha

 

10

 

20-25

 

85

Brócoli

 

7

 

20-22

 

75

Cebolla

 

10

 

30-35

 

80

Cebollín

 

10

 

30-35

 

55

Ciboullet

 

10

 

30-35

 

70 c.p.

Col China

 

6

 

18-20

 

60

Coliflor

 

7

 

20-25

 

75

Espinaca

 

8

 

18-22

 

75

Lechuga flotante

 

5

 

15-18 *

 

45

Lechuga en sustrato

 

5

 

20-22

 

55

Lulo o Naranjilla

 

30

 

45-50

 

80

Nabo Blanco

 

5

 

15-18

 

45

Perejil Liso

 

15

 

22-25

 

75 c.p.

Perejil Rizado

 

15

 

22-25

 

70 c.p.

Pimentón

12

 

35-40

 

80

 

Puerro

 

10

 

35-40

 

80

Repollo

 

7

 

30-35

 

90

Tomate

 

6

 

18-22

 

65

Tomillo

 

12

 

30-35

 

75 c.p.

 

*                    Cuando se trata del sistema flotante, éste es el tiempo para hacer el primer trasplante; el

 

segundo se realiza entre 12 y 18 días después del primero.

**                        Este tiempo varía según el clima predominante durante el desarrollo del almácigo y también

depende del adecuado manejo (riegos, nutrición, escardas, aporques, etc.).

c.p.                     Cosecha permanente formando manojos con las hojas que alcanzan el desarrollo apropiado

(cada 2 o 3 semanas).